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Hong Kong

Hungary

Iceland

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EF Foto

EF Photo (EN)

Ixil Dignity

Politics

Víctor Peña

Julia Gavarrete

In a meeting with the Supreme Electoral Tribunal, four women legislators from the political party Vamos denounced the Tribunal’s handling of the 2024 general elections. Fellow opposition parties Arena, the FMLN, and Nuestro Tiempo declined to attend altogether.

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Four Women Politicians Confront the Salvadoran Electoral Tribunal

Culture

Carlos Barrera

During the Festival of Calabiuza, a Salvadoran tradition observed on November 1 in Tonacatepeque, San Salvador, participants dress as figures from Salvadoran mythology such as Cipitio, Siguanaba, or the Headless Priest. Photo Carlos Barrera

Tonacatepeque Celebrates Salvadoran Mythology

Arévalo addressed the media after voting in the La Patria Evangelical School, in Zone 2 of the capital, where he and his family have lived for years. His opponent, Sandra Torres, silently cast her ballot and departed, refusing to say throughout the day whether she would recognize the results of the election if she lost. Two months later, she has yet to concede.

The Year Arévalo Returned to Guatemalan History Books

Historical Memory

Renán (third from left) is Efraín Arévalo’s youngest son. He was born on December 21, 1977, one month after his father’s disappearance. He grew up in Los Planes Segundos, a canton in the municipality of Chinameca, in the department of San Miguel, the same community where his father worked as director of the Escuela Rural Mixta José A. Mora. When he was 14 years old, his teacher showed him a photograph of Efraín Arévalo, which had been published in a 1977 newspaper. This was the first time Renán, who had grown up separate from the rest of the family, had seen his father’s face, and from that point on, he began developing an interest in meeting his other siblings. In 2008, he finally met his three sisters. “They say I look just like my dad. I feel proud because now I know he was an exemplary person who fought against injustice and for inequality in my country,” he says. Now, Renán is the same age as his father was when he disappeared. He attended his father’s funeral accompanied by his wife and three children.

45 Years after the National Guard of El Salvador Killed Efraín Arévalo, His Family Bids Him Farewell

Inequality

Potonico residents’ cleaning efforts seem like a drop in the bucket compared to the amount of garbage dragged in by the river currents. They say that day workers from the Ministry of the Environment once tried to place a trammel net to collect more garbage, but it gave way under the weight, so the labor of picking up vast amounts of waste must be done by hand.

Fishing for Garbage in El Salvador's Cerrón Grande Reservoir

En este terreno abandonado del cantón Palo Negro, en Coatepeque, Santa Ana, han aparecido 10  cadáveres en los últimos 6 años. En 2016, se encontraron 4 cuerpos en estado descomposición reportados previamente como desaparecidos. En 2017, ocurrió una masacre en la que murieron un expolicía, el hijo de un expolicía y dos hombres señalados como pandilleros. Entre 2016 y 2017,  las autoridades también reportaron el hallazgo de 2 personas no identificadas. 
 
En el mismo trágico terreno, en diciembre de 2020, Abraham Osorio encontró los restos de un muro que alguna vez fue casa y pintó los ojos de una mujer.Tituló a su obra Espejismo. Este mural puede apreciarse sobre el kilómetro 50 de la carretera Panamericana, en el trayecto que conduce de Santa Ana hacia San Salvador. 
 
Osorio, su autor, llama a su concepto “arte abandonado”.  Su intervención es en espacios rurales en estado de abandono, en infraestructura en ruinas de viviendas inhabitables destruidas por el tiempo o por caprichos humanos.
 
Pintó su obra Espejismo en medio del paisaje en el que las autoridades han encontrado los restos de masacres, homicidios múltiples y algunos desaparecidos.

Painting Over Death

After several hours of waiting, police and soldiers finally allow family members to start walking toward the prison. They walk for more than one and a half kilometers, carrying packages on their heads and backs for half an hour. After a little over an hour, some return to the waiting spot still carrying their packages: their relatives were not on the list, and they were unable to obtain any information about them.

Business and Misery Outside El Salvador's Prisons

"¿Le armamos el paquete? ¿Cuál quiere? ¿El de Izalco o el de Mariona?", repite una y otra vez Lidia Cruz, una vendedora de ropa de un puesto en la Tercera Avenida Norte y Calle Arce, en los alrededores del mercado Hula Hula, en el Centro de San Salvador. Un paquete está conformado por una camiseta blanca, calzoneta o pants, unas imitaciones de sandalias Crocs y un juego de ropa interior. El paquete es, pues, el uniforme de los presos. El paquete de Izalco y de Mariona (dos prisiones en el occidente y centro del país) son distintos, según los vendedores: el de Izalco lleva pants y el de Mariona es con calzoneta. Si bien en el Centro era posible encontrar esta ropa antes, Cruz admite que "todo aumentó con el Régimen de Excepción, con tanto detenido, pues". En los mejores días, ella ha vendido hasta 25 paquetes.
En El Salvador, entre el 26 de marzo y el 31 de mayo, según datos de la PNC, se han realizado más de 35,000 detenciones desde que inició el Estado de Excepción decretado por la Assmblea Legislativa tras la ruptura del pacto entre el Gobierno y la Mara Salvatrucha-13, lo que dejó 87 asesinatos en solo tres días. Durante las primeras semanas de detenciones, los familiares abarrotaban las tiendas de venta de paquetes que se ubican frente a las bartolinas conocidas como El Penalito, donde inicialmente se concentró a los detenidos por el régimen. Ahora, con la mayoría de detenidos ya reubicados, en su mayoría en el penal de Izalco y Mariona, los familiares han tenido que buscar otros lugares para comprar la ropa que puede ingresar a las cárceles del país. Solo en lo que va del Régimen de Excepción, vigente hasta finales de junio, la población carcelaria prácticamente se ha duplicado. 
Para Lidia ha sido una oportunidad este periodo de represión que elimina derechos civiles y otorga a policías y militares la posibilidad de detener y encarcelar por al menos 15 días a quien les parezca sospechoso: "¿Qué le vamos a hacer? Si por el mal de otros nosotros vendemos, ni modo, lo único que uno puede hace es tratar al cliente con amor y hacerle precio, tener un poco de empatía". En la cuadra, otros vendedores de paquetes también han tenido la misma suerte que Lidia, pero se quejan del aumento de precio por parte de los proveedores. Aseguran que antes compraban cada paquete a $10, y ahora está a $12.50. Ese no ha sido impedimento para vender, Lidia lo compara con la Navidad: "Ahorita mismo hay clientes que nos gastan hasta $35 solo en ropa que va para un penal. Esto solo en la época de Navidad lo vemos aquí. Así que se nos adelantó la Navidad". 
Diferentes organizaciones nacionales e internacionales han reportado la violación sistemática de derechos humanos de la población debido al régimen. Oficialmente se ha reportado que 12 capturados en este período de particular represión han muerto en centros penales. Algunas familias duermen afuera de las cárceles a la espera de noticias de sus capturados y sin posibilidades económicas de desplazarse de vuelta a sus lugares de vivienda e incluso sin dinero para comer durante su espera.

“Which will it be, dear, the Izalco uniform or Mariona?”

By 7:30 at night on April 27, the four men released from Izalco had already been reunited with their families. Noelys González continued waiting in the storm, along the edge of the dirt road leading to the prison facility, in the hopes of catching a glimpse of her brother, a cab driver arrested on April 7 in Juayúa, Sonsonate. She had no idea how she would return home that night. “I don’t know if I’ll leave here on foot or sleep here in the street. I was hoping my brother would be released today, and I’ll stay here. Maybe he’ll show. Every day dozens of women trod down this path with the same hope. Most of them end the day frustrated and exhausted from the heat and seasonal rain. Photo: Carlos Barrera/El Faro

The Women Searching for Their Sons in the Dark

Fred Ramos

A young man with a makeshift shotgun stands guard at one of the entry points to UNAN. June 27, 2018.

The 2018 Nicaraguan University Siege

Migration

Byron Alvarado's second skin is the crest of El Salvador tattooed across his heart. Byron was born in Los Angeles, but his father is from San Miguel. His homeland follows him wherever he goes, he states proudly, before hurrying into Dignity Health Sports Park in Carson, California. That night, August 21, 2021, El Salvador held a friendly match with Costa Rica in a stadium filled to the brim with Salvadorans.

Ixil Dignity

Ixil Dignity

Four Women Politicians Confront the Salvadoran Electoral Tribunal

Tonacatepeque Celebrates Salvadoran Mythology

The Year Arévalo Returned to Guatemalan History Books

45 Years after the National Guard of El Salvador Killed Efraín Arévalo, His Family Bids Him Farewell

Fishing for Garbage in El Salvador's Cerrón Grande Reservoir

Painting Over Death

Business and Misery Outside El Salvador's Prisons

“Which will it be, dear, the Izalco uniform or Mariona?”

The Women Searching for Their Sons in the Dark

The 2018 Nicaraguan University Siege

El Salvador Plays at Home in the United States